Mamerto Reyes Hernández (Economista Agrícola)
A principios de noviembre terminé una investigación sobre la transmisión de precios en productos derivados del petróleo. Envié un artículo a la Revista Análisis de la Realidad Nacional del Instituto de los Problemas Nacionales de la Universidad de San Carlos, pero todavía no lo han publicado. Espero que lo hagan en los primeros números de 2023. Por ser un tema de actualidad me pareció conveniente socializar los resultados de este trabajo. Estos tratan sobre la transmisión de precios del mercado internacional de petróleo crudo al mercado nacional de gasolina y diésel.
Se encontró que las relaciones que existen entre los precios nacionales de gasolina y diésel y el internacional de petróleo crudo son directas. Es decir, aumentan cuando suben los precios del petróleo crudo y bajan cuando éstos bajan. Sin embargo, la transmisión de precios es incompleta. Por cada 1% en que aumente el precio del petróleo, la gasolina aumenta en 0.6% y el diésel en 0.78%.
Por otro lado, la transmisión es simétrica para los precios de la gasolina y asimétrica para los precios del diésel. Por cada quetzal en que suba o baje el precio del petróleo crudo por galón, el precio de la gasolina variará directamente en Q1.31 y un mes después se corregirá en 15 centavos. Y por cada quetzal en que el precio del petróleo aumente, el precio del diésel aumentará en Q1.43 y un mes después se corregirá en 25 centavos. Por cada quetzal en que el precio del petróleo disminuya, el precio del diésel disminuirá Q1.42 y un mes después el precio se corregirá en 15 centavos. Por la diferencia en las cantidades de ajuste, se dice que el precio del diésel responde más rápido a aumentos de precios del petróleo que a sus descensos.
De acuerdo con la literatura sobre el tema de la transmisión de precios, la simetría de la transmisión de precios hacia los precios de la gasolina superior puede interpretarse como un signo del mantenimiento de la competitividad del mercado de gasolina en Guatemala. Mientras que la asimetría de la transmisión hacia los precios del diésel sugieren la existencia de faltas a la competitividad. Sin embargo, es muy difícil que los mercados de la gasolina y diésel sean diferentes en términos de competencia, más en el caso en que el escenario legal en que actúan es el mismo para ambos. Por otro lado, en este escenario legal han existido episodios de coacción y concertación de precios, que hacen dudar de la existencia de competitividad en el mismo, como los ocurridos en 2018 (Prensa Libre, Bolaños, 2018, mayo 29).
En esa ocasión, la Gremial de Importadores de Hidrocarburos contrató un experto colombiano en derecho de la competencia, quien sostuvo que no ha existido ningún tipo de colusión entre empresas. Indicó que la igualdad de precios entre las mismas fue resultado de paralelismo de precios, el cual según insistió resultó por la competencia entre las mismas (Prensa Libre, Bolaños, 2018, julio 18). Sin embargo, el paralelismo es un caso tácito de colusión. Ocurre cuando las empresas deliberadamente no compiten y operan al mismo precio. El paralelismo como colusión tácita no está normado en la ley de comercialización de hidrocarburos de Guatemala y en ninguna ley del país y por lo mismo no se tipifica como delito contra la competencia.
De este modo, la simetría y asimetría encontradas en la transmisión de precios no se puede tomar a ciegas como una variable proxy de competitividad o falta de la misma en el mercado de los hidrocarburos en Guatemala. Además el mercado de estos combustibles nunca ha sido un mercado competitivo, primero, porque el número de importadores no ha pasado de cinco, y segundo, porque las estaciones de servicio no compiten. El reducido tamaño de la población de importadores se debe a barreras a la entrada existentes en el mercado nacional, las cuales se derivan de los requerimientos de inversión relativamente altos que necesita la importación de petróleo y su posterior procesamiento y distribución mayorista de los derivados. Por otro lado, otra fuente de barreras son las formalidades legales para los distribuidores minoristas. Adicionalmente, la ausencia de competencia también la explica el pequeño número de sustitutos que enfrentan los hidrocarburos, lo cual hace que su demanda sea inelástica.
Estos elementos de ausencia de competitividad más la observancia de paralelismo de precios ponen de manifiesto la necesidad de una ley de comercialización de hidrocarburos más estricta en la consideración de las faltas a la competencia. Por otro lado, el país necesita una ley de competencia que cubra todos los mercados, no sólo el de productos derivados del petróleo.
Presidente - Oscar Clemente Marroquín Director General - Pedro Pablo Marroquín P. Editoras - Hedy Quino - Lucero Sapalú - Grecia Ortiz Editor De Audiencias - Douglas Gámez
lahora@lahora.gt 9 Calle "A" 1-56 zona 1, Guatemala, Guatemala, 01001 Teléfono - +502 2423 1800 Fax - +502 2423 1837
© Copyright 2022 - La Hora | Diseñado por La Hora y Desarrollado por SMT